Las playas de Guardamar del Segura, en Alicante, han amanecido estos últimos días con miles de peces muertos en sus orillas. Los pescadores los han encontrado junto a la desembocadura del Segura, en la playa o flotando en el mar. Incluso, algunos de ellos aún estaban agonizando. La Confederación Hidrográfica del Segura está investigando las causas del aumento de mortandad de estos ejemplares. Se cree que pueda haberse producido un vertido o una reducción de oxígeno, que en ocasiones anteriores han ocasionado las altas temperaturas o la escasez de agua en el curso del río.