El ministro del Interior, Fernando Grande-Marlaska, ha afirmado que todas las instituciones implicadas en el caso del homicidio del niño de 9 años de Lardero, ocurrido el jueves pasado, se han atenido "al principio de legalidad". Ha indicado que en el suceso "han estado incorporadas todas las instituciones que han trabajado como han entendido razonable, Instituciones Penitenciarias, la Fiscalía y el propio juez de vigilancia penitenciaria".
Ha recordado que "a la persona a la que se le imputa el asesinato de Álex, desde el año 2013 de permisos penitenciarios, que tienen aprobados por el juez de vigilancia penitenciaria, y disfruto de 39", para a continuación, señalar que en el año 2020, en febrero, "cuando ya había cumplido tres cuartas partes de la condena se le otorga un tercer grado restringido, por el que no podía salir del Centro de Inserción Social en el que se encontraba, y en el abril, el juez de vigilancia penitenciaria le da la libertad condicional".
Por ello, ha afirmado que "todas las instituciones han trabajado ateniéndose al principio de legalidad". Ante esto, "cuando ocurre una desgracia como esta se evalúa mucho más los acontecimientos para tratar de sacar unas conclusiones".
Grande-Marlaska ha ofrecido declaraciones a los medios de comunicación, tras participar, junto a la ministra de Educación, Pilar Alegria, en el 15º Congreso Regional del PSOE, que se ha celebrado en Logroño. Ha mostrado su "solidaridad" y "apoyo" del Gobierno de España "a los padres, al hermano y a toda la familia, y amigos de Álex". "Una tragedia que nos toca a todos, a toda persona que tenga un mínimo sentido de humanidad", ha añadido el ministro.
Sobre las palabras de la portavoz del Grupo Parlamentario del PP en el Congreso, Cuca Gamarra, que exigía "responsabilidades" al ministro por el tercer grado del asesino, éste ha señalado: "Tenemos una derecha, una oposición que le gusta instrumentalizar las tragedias humanas con un carácter político".