El futuro energético y el precio de la luz es uno de los grandes debates sociales y políticos, pero en la vuelta al curso político de esta España tan convulsa hay otros frentes que van a continuar abiertos: algunos institucionales y sin visos de solución a corto plazo. Repasamos el año político que nos espera.

Se inicia un nuevo curso político con tres frentes abiertos: junto a la tormenta del precio de la luz, la renovación del poder judicial pendiente hace tres años, y la mesa de diálogo con Cataluña.

Este mes Gobierno y Govern tienen una cita en Barcelona para dialogar. “Mi principal prioridad es que Cataluña no se quede atrás en esta recuperación y para eso Cataluña lo que necesita es un Govern que salga del ensimismamiento en el que ha estado durante estos últimos 15 años”, ha señalado el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, en una entrevista concedida al diario ‘El País’.

El gobierno lleva inversión y recuperación a quienes quieren hablar de independencia en un encuentro aún sin fecha ni asistentes de primera línea confirmados. “A mí me parece que lo más importante no es si voy yo o no voy. Es que haya avances en esa mesa”, ha dicho.

Por tercer septiembre consecutivo, un Consejo General del Poder Judicial caducado echa a andar. “El mismo lunes en la apertura del curso judicial podemos pactar la renovación de los órganos constitucionales. La única condición es que los jueces elijan a los jueces”, ha propuesto el líder del PP, Pablo Casado.

Antes de modificar la ley para elegir a los jueces, responde Sánchez, hay que renovar el poder judicial. El orden de los factores aquí sí altera el producto. “Si el PP bloquea esa renovación, lo que está haciendo es no reconocer el resultado electoral. Es un comportamiento antidemocrático”, ha indicado Sánchez.

En política internacional, quedan como asignaturas pendientes Marruecos o Afganistán. “Permítame que como éxito colectivo celebremos que hemos salvado la vida de 2000 personas”, ha dicho Sánchez, quien saca pecho ante los dardos del PP a la coalición.

“Tenemos enfrente a una jaula de grillos en el PSOE, a un partido dividido, a un partido enfrentado, a un partido además que ocupa Gobiernos que no se entienden, que se pisan la manguera, que están todo el día discutiendo”, ha dicho Casado.

Por su parte, Yolanda Díaz, vicepresidenta segunda y ministra de Trabajo, ha afirmado que “este Gobierno de coalición lo vamos a cuidar”. De la misma manera, Sánchez expresaba: “Yo me planteo el continuar con el Gobierno de coalición hasta el último día de la legislatura. Si pudiéramos rebajar los decibelios, yo creo que sería positivo”.

En definitiva, un nuevo curso y un mismo clima: las posiciones encalladas entre el Gobierno y el principal partido de la oposición.