Máxima tensión en el aeropuerto de Hamburgo, en Alemania, desde que ayer un hombre armado, y que según la Policía podría llevar algún tipo de explosivo, logró entrar en la pista en su coche con su hija de cuatro años como rehén. La madre de la pequeña había alertado a la Policía del presunto secuestro de la menor. Las autoridades tratan de convencerle para que se entregue. El cierre del aeropuerto afecta a más de 34.000 pasajeros.

El hombre armado ha irrumpido con su coche en el aeropuerto de la ciudad de Hamburgo, Alemania, llevando a su hija de cuatro años como rehén en lo que, según los investigadores, parece una disputa por la custodia de la menor y que ha causado el cierre del lugar y la cancelación de todos los vuelos.

El hombre, de presuntamente 35 años, entró en el aeropuerto atravesando una barrera con su vehículo sobre las 20.00 horas (hora local) y llegó hasta la pista de aterrizaje, donde disparó un par de veces su arma y lanzó dos botellas ardiendo, "una especie de cocktails molotov", que ya han sido extinguidas por los bomberos del aeropuerto, ha informado una portavoz de la Policía Federal al periódico 'Welt'.

Una de las últimas actualizaciones de la Policía de Hamburgo apunta a que la situación está "estancada" a las 10.00 horas mientras el equipo de negociación "sigue en contacto con la persona que está en el vehículo". "Debemos suponer que posee un arma de fuego real y posiblemente también artefactos explosivos de tipo desconocido", ha indicado tras doce horas de contencioso.

"Nuestra principal prioridad es proteger a la menor. Según los datos de los que disponemos actualmente la niña se encuentra bien físicamente. Las negociaciones continuarán", ha añadido la Policía. Medios alemanes como la televisión pública ARD han informado de que el hombre habría anunciado en varias ocasiones su intención de entregar a la niña, lo que por el momento no ha sucedido.

La esposa del hombre, que se encontraba en Stade, cerca de Hamburgo, había denunciado previamente a la Policía Estatal sobre un posible secuestro de niños, ha afirmado la portavoz, por lo que "estamos asumiendo una situación de rehenes". "Damos por sentado que el trasfondo de la operación es un conflicto de custodia", ha publicado la Policía de Hamburgo en su cuenta de X, antes Twitter, poco antes de medianoche.

La portavoz ha relatado que actualmente están teniendo "buen contacto con el perpetrador", con el que se está negociando en turco y ha añadido que "aquí confiamos en una solución negociada". Se ha mostrado optimista por el hecho de que las discusiones se prolongaran durante tanto tiempo: "Es una señal absolutamente buena". "Él está frente a nosotros. Quiere hablar con nosotros y lo valoramos inicialmente como muy positivo", ha enfatizado y ha explicado que en el lugar hay un grupo especial de policía y psicólogos policiales.

Una portavoz policial citada por la radio NDR 90.3, Sandra Levgrün, ha destacado que hay "psicólogos penales trabajando". "Estamos hablando con el secuestrador. Esperamos que haya una solución negociada", ha resaltado. Los pasajeros que se encontraban en los aviones en pista han tenido que ser evacuados y trasladados a un hotel cercano. Por el momento, la Policía no tiene información de heridos, incluidos el perpetrador y la menor.

La página web del aeropuerto ha informado de que, "debido a una medida de la Policía Federal, actualmente no es posible realizar despegues ni aterrizajes", a lo que la portavoz del aeropuerto ha agregado que normalmente habría seis despegues entre el cierre oficial del aeropuerto a las 20.24 horas y el final de las operaciones a las 23.00 horas y se esperaban 21 aterrizajes. Unos 3.200 pasajeros se han visto afectados.