En Estados Unidos preocupa cada vez más el aumento de robos en comercios. Estos robos han llevado a algunas empresas, hasta un 30 por ciento en los últimos meses, a cerrar sus tiendas por los atracos continuados. Grandes cadenas que se muestran impotentes ante un fenómeno que no deja de crecer.
Los agentes se quejan de que la última reforma penal da mayor impunidad a los ladrones y piden mano dura. En Nueva York se considera delito menor cuando lo que se ha robado no llega a los 1.000 dólares, y lo mismo ocurre en al menos 20 estados del país. Esta cifra es difícil de alcanzar y por eso los ladrones quedan en libertad a las pocas horas y enseguida vuelven a delinquir.
En los últimos meses cerca del 30% de los negocios de Estados Unidos han cerrado sus puertas, entre ellos nueve espacios de la famosa cadena de tiendas Target. Aseguran que es para proteger a sus empleados, al negocio y a los clientes. A los que la noticia no les has gustado nada. Lo mismo ocurre con la cadena de supermercados Whoole Food que ha cerrado su tienda insignia en San Francisco.
Son tantos los robos que las cuentas ya no salen. La situación se extiende por todo el país, dice el alcalde de Nueva York Eric Adamas. Los comerciantes protegen sus productos bajo llave, pero esta solución ahuyenta a los clientes Aseguran que están desesperados. Según la Federación Nacional de Minoristas en el 2022 las pérdidas por robos fueron de 106.000 millones de euros, una cifra que podría superarse este año.