Cruce de mensajes en una red social entre el líder de EH Bildu, Arnaldo Otegi, y el de Vox, Santiago Abascal, tras lo ocurrido ayer durante el chupinazo de las fiestas de Estella, Navarra. Todo comenzó cuando el jefe de la Policía Municipal sacó a la fuerza a una concejal de Bildu que irrumpió en el balcón consistorial ondeando una ikurriña.
Arnaldo Otegi ha aprovechado para recordar el asesinato en 1936 del entonces alcalde de la localidad, del PNV, por parte de los fascistas, y a cuyos herederos señala por este incidente. Seguidamente, Santiago Abascal le ha acusado de seguir apuntando a servidores públicos para continuar con el terror que sembró la banda terrorista durante décadas.
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha acusado al coordinador de EH Bildu, Arnaldo Otegi, de seguir "practicando el terror", con la "impunidad que Sánchez le garantiza", al "apuntar" al policía que impidió este viernes a una concejal de esta formación ondear una ikurriña en el balcón del Ayuntamiento de Estella (Navarra).
"El socio del PSOE, con la impunidad que Sánchez le garantiza, haciendo lo que más le gusta; apuntar a un servidor público, -que hace cumplir la ley-, para que otros le hagan la vida imposible", ha denunciado Abascal en su cuenta de Twitter, enlazando con otro tuit publicado por el líder de Bildu en relación a este incidente.
En ese mensaje, Otegi señalaba: "Lizarra (Estella), donde los fascistas fusilaron al alcalde del PNV Fortunato Agirre y donde sus herederos tratan así a la bandera que defendió y a una representante de la voluntad popular. ¡No pasarán!".
En su respuesta a este tuit, Abascal añadía: "Durante muchos años unos apuntaban y otros disparaban. Otegi apuntaba, y sabe el miedo que eso causaba en mucha gente. Por eso sigue apuntando. Siguen practicando el terror". La Policía Municipal de Estella retiró este viernes por la fuerza del balcón del Ayuntamiento de la localidad a la concejala de EH Bildu Elisabet Ciordia cuando ondeaba una ikurriña nada más lanzarse el cohete anunciador de las fiestas patronales.
El propio jefe de la Policía estellesa, Rodrigo García, la cogió en volandas y, pese a la resistencia de la edil que continuaba exhibiendo enérgicamente la bandera, consiguió sacarla del balcón de la casa consistorial hasta llevarla al salón interior.