Al menos nueve personas han muerto, entre ellas niños, en un tiroteo en un centro comercial de Texas, Estados Unidos. El agresor, que se bajó de un coche y se puso a disparar a la gente, cayó abatido por un policía de esta localidad muy cercana a Dallas.
Según la oficina del Sheriff del condado de Collin el tirador desató el caos alrededor de las 15.30 horas (hora local) y la investigación apunta a que actuó solo, pero seguirá activa hasta que se confirme.
El tiroteo ha ocurrido en Allen, un pequeño suburbio al norte de Dallas. En las imágenes que circulan por Internet se puede ver a policías locales barriendo las tiendas como si buscaran a un tirador alrededor de las 18.00 horas (hora local), más de dos horas después de que, según los informes, llamaron a la policía a los puntos de venta.
Un chico de 17 años ha hablado con 'The New York Times' y ha manifestado que se encontraba en su coche, porque había llegado pronto a su turno en una de las tiendas cuando ha escuchado "probablemente más de 20 disparos" y ha visto a gente salir corriendo del lugar.
El joven recogió a un desconocido en su coche y los dos han abandonado el centro comercial. "Tan pronto como escuché los disparos y los gritos de la gente, no esperé a ver qué estaba pasando, retrocedí y salí de allí" ha añadido.