En la iglesia de La Palma de Algeciras no ha sido un domingo más tras el asesinato de su sacristán a manos de un marroquí que permanece detenido a al espera de declarar mañana por terrorismo yihadista en la Audiencia Nacional.
Hoy los feligreses que han acudido a la iglesia donde ejercía como sacristán Diego Valencia han rezado y llorado por él.
Este domingo ha sido de rezos en la localidad gaditana pero, también, un buen día para peguntarnos qué heridas pude dejar este asesinato en una ciudad donde ha habido convivencia siempre entre distintas culturas y confesiones.
Por su parte, sus vecinos se han mostrado abiertos a cualquier tipo de religión en la zona. Ellos mismos reconocen que se trata de un hecho aislado y que este asesinato no debe empañar la convivencia pacífica de la que se caracteriza Algeciras.
Las evidencias halladas en el registro de la infravivienda en Algeciras donde residía Yasin Kanza no permiten resolver por ahora los interrogantes planteados si bien el trabajo de la comisaría general de información ya ha permitido encontrar actividad radical en redes sociales por parte del detenido.
Los agentes han encontrado publicaciones en Facebook de Yasin Kanza que consisten en vídeos con discursos de imanes radicales llamando a la yihad, precisan las fuentes consultadas. Yasin Kanza no publicaba en Facebook con su nombre auténtico. Entre los efectos incautados está el teléfono que utilizaba el atacante.
Por otra parte, la forma de actuar de Yasin Kanza, con una actuación errática e improvisada, hace sospechar de que pudiera sufrir algún tipo de trastorno, si bien en Marruecos, de donde habría salido con 22 años, no tiene antecedentes médicos en ese sentido.
Yasin Kanza residía en España de forma irregular. Fue detenido el 16 de junio de 2022 y se le abrió un proceso administrativo de expulsión que seguía en curso en el momento de los hechos.