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Hay evidencias de que Yasin Kanza, el hombre que mató al sacristán de Algeciras e hirió a otras cuatro personas, estaba radicalizado y tenía propaganda yihadista sacada de redes sociales. También parece que pudiera sufrir algún tipo de trastorno psiquiátrico.
No es, sin embargo, el único detenido por vinculaciones con el yihadismo en España este año. ¿Quedan células terroristas en España activas o son solo ya lobos solitarios sin cobertura ni apoyo?
El mismo día del ataque, Yasin Kanza, envío mensajes de apoyo al Daesh y a la 'guerra santa' en Facebook. Se sabe ya que se radicalizó rápidamente, en apenas dos meses. Se volvió solitario y agresivo con actitudes que sorprendieron incluso en la mezquita de Algeciras.
Adoctrinado a través de las redes sociales. Los investigadores lo descubrieron gracias a la información incautada en la casa okupada donde vivía. Entre toda la información que consiguieron los agentes, se incautó un pendrive y un ordenador con propaganda yihadista.
Ahora, los investigadores intentan averiguar si el joven de 25 años y pendiente de expulsión pudo ser manipulado por otros. Se sabe también que tiene antecedentes psiquiátricos en Marruecos pero sin delitos conocidos en su país.
Para los expertos el caso de Algeciras demuestra que la amenaza yihadista sigue ahí. España se mantiene un nivel alto de alerta antiterrorista. Ayer mismo en Girona, Policía Nacional y Guardia Civil detuvieron a un hombre en un avanzado proceso de radicalización yihadista.
Las células terroristas han dado paso a los lobos solitarios. Además del caso de Algeciras, son ya cinco los detenidos en lo que va de año. Desde los terribles atentados de Barcelona se han detenido en España más de 1.000 yihadistas.
Intentos frustrados, como la célula terrorista de Ripoll, que pretendió sin éxito atentar contra la Sagrada Familia de Barcelona o el del marroquí Zouhair el Bouhdidi, de 23 años, detenido en 2019 antes intentar inmolarse en mitad de la Semana Santa sevillana.
España funciona a nivel policial pero falla a la hora de prevenir la radicalización. Ahora, Yasin Kanza permanece en los calabozos en Madrid para ser interrogado en la Audiencia Nacional el lunes 30 de enero.