La nieve del ya invierno meteorológico se apodera de Ucrania, con máximas de hasta -4º C en la capital, Kiev. Las autoridades advierten de que los cortes de energía durarán varios meses, por lo que millones de ciudadanos se enfrentan a la pesadilla de afrontar el invierno más duro desde la II Guerra Mundial. Para resguardarse del frío, se han habilitado varias carpas por la ciudad.
Los civiles acuden también a ellas cuando se quedan sin electricidad. Se trata de puntos de invencibilidad donde pueden encontrar acceso a Internet o cargar sus teléfonos móviles. Además, están provistos de comida, agua e incluso de una zona con camas para poder descansar. Otra opción es buscar calor en los subterráneos del Metro.
La ONU investiga si los ataques con misiles contra infraestructuras energéticas en Ucrania se pueden considerar crímenes de guerra. El alcalde de Kiev, Vitaly Klitschko, denunció a mediados de noviembre que esos bombardeos contra sistemas de calefacción tienen por objetivo "congelar" a la población civil, por lo que Rusia está cometiendo un "genocidio".
Al respecto, Klitschko insistió en que no se trata de un conflicto tradicional "porque una guerra tiene reglas claras: nunca tocar a los niños, a las mujeres y a los mayores". Además, subrayó que la guerra afecta y desestabiliza toda Europa: "Necesitamos paz y libertad, estamos luchando por ello".
El primer edil ha hecho un llamamiento ahora para que las personas, que pasean entre edificios destruidos y tanques cubiertos de nieve, hagan acopio de ropa de abrigo, alimentos y agua ante el riesgo de nuevos ataques rusos vuelvan a dejarles sin electricidad a tan gélidas temperaturas.
Se cumplen 283 días de guerra, desde el pasado 24 de febrero, y los soldados ucranianos defienden Bajmut, localidad de la región de Donetsk (en el este del país), donde las tropas del Kremlin están realizando grandes esfuerzos y recrudeciendo la ofensiva para hacerse con el control. Mientras tanto, imágenes de satélite nos dejan ver la destrucción de Mariúpol.
En el terreno diplomático, a la propuesta del presidente de Estados Unidos, Joe Biden, de hablar con el mandatario ruso, Vladimir Putin, con el objetivo de poner fin a la guerra, Moscú responde que antes Washington deberá reconocer la anexión rusa de los territorios ucranianos.
Por otra parte, la Armada del gigante norteamericano ha presentado su último cazabombardero, el primero en más de tres décadas. Una aeronave que dispone de la última tecnología y que es capaz de transportar tanto armamento convencional como nuclear.