La cifra de fallecidos en el asalto masivo a la valla de Melilla podría ser mucho mayor. Según indican algunas ONG, al menos 27 personas habrían perdido la vida. De momento, las autoridades reconocen 18 muertos y más de 60 heridos. Estos últimos se encuentran ingresados en el Hospital Comarcal de la ciudad autónoma.
Según fuentes de la Guardia Civil, ha sido uno de los saltos más agresivos. Y es que los inmigrantes subsaharianos que han intentado saltar la valla llegaron con herramientas para cortar el cercado fronterizo.
De los 2.000 que lo han intentado, cerca de 140 lo han conseguido, siendo trasladados al centro de estancia temporal de inmigrantes (CETI). De los tres subsaharianos que estaban hospitalizados, dos ya han recibido el alta. Del medio centenar de agentes que resultaron heridos, uno se encuentra de baja.
En la zona de la valla que está en el barrio chino, unos 500 migrantes consiguieron abrirse paso con la utilización de radiales y alcanzar suelo español, dejando atrás los disparos que les acompañan desde la parte marroquí.
Al fondo, en las inmediaciones del monte Gurugú, en el país norteafricano, otros 1.500 subsaharianos intentan alcanzar la valla. Sin embargo, los agentes marroquíes acaban frustrando sus deseos. Exhaustos, acaban tumbados en el suelo y mezclados, posiblemente, con alguno de los fallecidos.
Las organizaciones humanitarias han denunciado la violencia con la que se emplearon los policías de Marruecos para impedir el salto, convirtiéndolo en el más trágico de la historia.
Mientras, 133 personas conseguían su objetivo de acceder a territorio europeo y corrían, en medio de muestras de júbilo, por las calles de Melilla. Su alegría contrasta con el alto precio que han pagado sobre todo los muertos pero también los heridos, más de 100 en el lado español.
La mayoría de quienes han logrado saltar la valla rondan los 15 años, lo que magnifica la tragedia que les impulsa a jugarse la vida de esta manera.
El salto a la valla se produce tres meses después de que el Gobierno español diera un giro a su posición sobre el Sáhara Occidental. Las autoridades estaban alertadas desde este pasado jueves.
Beatriz Mesa señala que no hay una reacción oficial del Ejecutivo de Rabat a la tragedia de este viernes en la frontera entre Melilla y Nador.