Según algunas personas cercanas, la reina Letizia está desolada por la repercusión que ha tenido el rifirrafe con Doña Sofía. Desde que llegó a la Casa Real la reina siempre ha mostrado su gran admiración por la abuela de sus hijas.
Al comienzo, el apoyo fue mutuo y en numerosas ocasiones Doña Letizia ha reconocido en público la gran labor de la madre del rey. "El ejemplo impagable de la Reina", mencionaba Letizia el día de pedida de mano. Los elogios continuaban en entregas de premios: "Le acabo de entregar el premio Joaquín Ruíz Jiménez a la reina Sofía, a mi suegra. Y yo creo que nunca la palabra suegra ha sonado mejor", anunciaba entonces.
Siempre buenos deseos al pasar, Doña Sofía, el testigo: "Te deseo todo lo mejor en esta maravillosa labor", comentaba Sofía. Una reina que ha buscado su lugar en cada acto de forma discreta. Una abuela que siente debilidad por sus nietos. A los que reunió en una felicitación navideña por arte de photoshop. A los que no olvida ni siquiera en el bolso de verano. Hasta en los momentos más complicados para Iñaki Urdagarín y su hija, la Infanta Cristina, ha intentado tener cerca a los suyos en vacaciones.
UNA FOTO Y UN BESO, MOTIVOS DEL DESENCUENTRO
Una foto y un beso han mostrado una cierta tensión entre doña Sofía y la reina Letizia. Aunque el mayor ejemplo de esto es la ya famosa escena de la fotografía que quiere tomarse la emérita con sus nietas, un nuevo vídeo en el que Letizia borra de la frente de la princesa Leonor un beso de doña Sofía ha vuelto a llamar la atención de la relación entre ambas.
Y es que cuando parecía que la tradicional misa no iba a generar más polémica en la familia real, una nueva escena posterior a la del intento de foto vuelve a mostrar esa cierta tensión entre la emérita y la reina. Todo por un beso, ya que es doña Sofía la que le da un beso en la frente a Leonor, a lo que Letizia reacciona limpiando con sus propias manos dicho beso.
¿DE QUIÉN ES LA CULPA?
Para expertos en protocolo, el error inicial es de la reina Sofía, al intentar hacerse una foto familiar dentro del templo, cosa que el protocolo no permite. El siguiente error es para la reina Letizia, porque al intentar ser fiel a las reglas, al final su imagen ha salido peor parada. Los periodistas expertos en Casa Real consideran que hay tormenta familiar, que esto va a pasar factura a la reina Letizia.