Jesús Hermida siempre defendió la nobleza del oficio de periodista. Fue cronista de acontecimientos que marcaron el siglo 20, y todo con un estilo inigualable. Acontecimientos como el primer paseo del hombre sobre la Luna. Una maravillosa crónica que estimuló en muchos la curiosidad por el espacio. Entre ellos, a un pequeño chaval de seis años, Pedro Duque.