En Madrid se ha dado el domingo una historia ejemplar con final feliz. Un joven, de 19 años, con formación en primeros auxilios le ha salvado la vida a un conductor, de 47 años, que ha sufrido un infarto en una de las entradas de la ciudad y ha empotrado su coche. En este caso, sí podemos decir, que todo quedó en un susto y el joven ha sido felicitado por su heroísmo. Una actuación vital en el momento preciso.