Tercer día del juicio del procés y tras Oriol Junqueras le tocaba el turno de prestar declaración a Joaquim Forn, quien fuese conseller de Interior. Él era el máximo responsable de los Mossos D’Esquadra durante aquel referéndum ilegal previo a una declaración unilateral de independencia a la que hoy le ha negado el valor.
Rechazando las acusaciones de la Fiscalía y llegando a calificarlas de “peliculeras”, ha recalcado que la DUI era una “declaración política” que “no se votaba” y que, además, no se publicó en los boletines oficiales, ni del Parlament ni de la Generalitat.
Reafirmando no obstante su total compromiso político con el proceso independentista, niega haber utilizado a los Mossos a su mando para lograrlo. “No di instrucciones políticas a los Mossos”, ha dicho, asegurando que “ningún acto” de los agentes “fue contrario a la Constitución”.
De hecho, ha llegado a asegurar que antes de acceder al cargo advirtió al expresidente de la Generalitat de que éstos no incumplirían resoluciones judiciales.
Por todo ello, presenta la pasividad de los mossos durante el 1-O como algo inevitable, afirmando que era “difícil hacer otro tipo de actuación diferente”.
Después de manifestar que la declaración unilateral de la independencia se incluyó en el preámbulo de dos respuestas de resolución –de rechazo del artículo 155 y de apertura de un proceso constituyente–, demostrando con ello su carácter “político” al insistir en que la resolución en sí no se votó, ha contestado al fiscal Fidel Cadena afirmando que en la reunión mantenida la noche del 25 de octubre en el Palacio de la Generalitat, donde los miembros del Govern discutieron sobre la conveniencia o no de convocar elecciones, él apoyo precisamente la convocatoria electoral. También lo hizo, ha dicho, Carles Puigdemont. La intención era evitar el 155, ha recalcado, pero ha culpado a la ausencia de respuesta por parte del Gobierno de Mariano Rajoy para justificar los motivos por los que se precipitó la DUI.
“Ello llevó a la declaración, no de independencia, sino la que se aprobó”, ha dicho, insistiendo en que "se apuró hasta el último momento buscar una salida política a la situación".
Más allá, tras contar que se encontraba en Bruselas cuando se presentaron las querellas en la Audiencia Nacional y el Tribunal Supremo por rebelión, sedición y malversación, ha explicado: “Volví conocedor de que tenía una citación en la Audiencia Nacional y porque estoy convencido de que la organización y participación en un referéndum no es ningún tipo de delito y quería venir a explicarme. No tuvimos la oportunidad de hacerlo con tranquilidad porque recibí la citación un día antes y no pudimos preparar las declaraciones"