La capilla ardiente de Alfredo Pérez Rubalcaba en el Congreso se ha convertido en el homenaje póstumo más importante a un político desde la muerte de Adolfo Suárez. Un homenaje a Rubalcaba, pero también la demostración de que hay políticos del pasado, a menudo tan denostado, que sí se han ganado el respeto y la admiración que todavía deben demostrar los dirigentes de hoy. El exlíder socialista ya ha sido incinerado en la intimidad en el tanatorio de la paz de Alcobendas en Madrid. En la sede del PSOE también se ha llevado acabo un homenaje al estar disponible un libro de firmas para recordar a Rubalcaba. Durante toda la jornada se han podido ver a dirigentes, afiliados, compañeros, sindicalistas y amigos de Alfredo Pérez Rubalcaba que no han dudado en dejar una pequeña firma. La sede volverá a abrir durante la mañana del domingo 12 de mayo hasta las 14:00 horas.