En concreto, estas ayudas se dividen en las correspondientes al a convocatoria ordinaria de concesión de 5,99 millones de euros para costes de 2017 y en la concesión directa de 77,7 millones de euros para complementar hasta el 100% de la ayuda máxima establecida de los costes del año 2016. El objetivo es compensar los costes indirectos imputables a las emisiones de gases de efecto invernadero repercutidos en los precios de electricidad, que soporta el consumidor industrial.
El dinero irá a 151 beneficiarios cuyas instalaciones están expuestas a un riesgo significativo de fuga de carbono, es decir, que puedan decidir trasladar su producción a otros países debido al os costes del as políticas climáticas de la Unión Europea.
Estos desarrollan mayoritariamente su actividad en Galicia, con el 25% del total de las ayudas concedidas, seguida de Asturias, con el 18% y Cataluña, con el 16%. Por sectores, el 38% de las ayudas han recaído en el sector siderúrgico del acero, seguido del aluminio, con el 23%; el sector químico, con un 18%
En relación con la concesión directa de 77,7 millones de euros, los 136 beneficiarios de las ayudas se encuentran mayoritariamente en Galicia, con un porcentaje del 26% del total de las ayudas, seguida de Asturias con el 18% y Cataluña con el 16%. Por sectores, el sector del acero recibe el 32% del total, seguido del aluminio con un 22%; el sector químico, con el 16%; y el papel, con el 11%.
Con respecto a la concesión directa de 77,7 millones de euros, los 136 beneficiarios de las ayudas se encuentran de nuevo mayoritariamente en Galicia, con un porcentaje del 26% del total de las ayudas. Tras ella se sitúan Asturias y Cataluña, con un 18% y un 16% respectivamente. Por sectores, el sector del acero recibe el 32% del total, seguido del aluminio, con un 23% y el sector químico, con un 18%.