Según han informado fuentes parlamentarias, Sanz Roldán ha manifestado ante los grupos parlamentarios en su comparecencia a puerta cerrada en la Comisión de Gastos Reservados del Congreso que puede garantizar en un "99,9 por ciento" que las comunicaciones del presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, no han sido intervenidas, si bien ha dejado claro que la única manera de que pudiera haber sido escuchado sería si se hubiese puesto en contacto con alguien cuyas comunicaciones sí estuvieran pinchadas.
En su intervención inicial, el director del CNI, que ha acompañado su alocución de un proyector con el que ilustrar las explicaciones más técnicas, ha aclarado que su principal cometido al comparecer en el Congreso era dejar claro a los diputados de que los servicios de inteligencia españoles siempre actúan con legalidad.
Por eso, ha indicado, cada operativo que quiere llevar a cabo el CNI va precedido siempre de una solicitud al juez del Tribunal Supremo que se encarga de estos asuntos en la que se detallan los motivos por los que se quiere realizar. No obstante, ha remarcado que si el juez se niega, no hay nada que el CNI pueda hacer.
Pero a la pregunta concreta de varios diputados de si la NSA o algún otro servicio de inteligencia estadounidense ha actuado de forma ilegal en España, Sanz Roldán no lo ha confirmado ni desmentido, sino que se ha limitado a responder que los norteamericanos se rigen por sus propias leyes.