Precisamente ayer, el día de la despedida de Rajoy, salió Aznar y de nuevo cargó contra su partido. Ni se siente militante, ni comprometido ni representado. Así empezó un discurso, no muy largo, pero que abrió más aún la brecha entre el PP de Rajoy y el del hombre que le designó. Mariano Rajoy ha sido el primero en contestarle, pero sólo el primero. Detrás, el partido ha salido en tromba contra Aznar.