La Comunidad envió un requerimiento al Ayuntamiento al considerar que en el protocolo faltaban algunos trámites con los que el Consistorio creía que sí había cumplido. En concreto, desde Cibeles creían que con enviar el protocolo antes del periodo de alegaciones valía y lo deberían haber hecho también después.
La Junta de Gobierno, por tanto, ha tomado la decisión, después de la amenaza de la Comunidad de llegar al os tribunales, de anular durante 10 días el protocolo y enviarlo a el organismo autonómico para que haga las observaciones que considere conservando todos los trámites realizados, como el periodo de alegaciones públicas.
Pasados estos 10 días, el nuevo protocolo volverá a la Junta de Gobierno para activarlo de nuevo. El Ayuntamiento ha lamentado las "continuas trabas de la Comunidad" y cree que se cumplió con lo establecido, pero no se quiere entrar en una discusión burocrática porque "lo que está en juego es la salud de la gente".
El nuevo plan para combatir la contaminación por dióxido de nitrógeno (NO2) ahora suspendido buscaba hacer más frecuentes las restricciones a la conducción, que se extenderán a toda la ciudad y afectarán sobre todo a los vehículos más viejos. El gobierno de Carmena lo aprobó el pasado 27 de septiembre tras constatar que el de febrero de 2016 no era útil porque se activaba en muy pocas ocasiones.