Por su parte, Uber ha anunciado que dejará de funcionar en Barcelona a partir de este viernes por las "restricciones" a los vehículos de alquiler con conductor (VTC) aprobadas por el Govern.
Según ha explicado la compañía este jueves en un comunicado, se han visto "obligados" a tomar esta decisión tras la aprobación del decreto que fija la obligación de precontratar el servicio con una antelación de 15 minutos, que entra en vigor este viernes.
Aun así, la empresa se ha mostrado "a disposición de la Generalitat y del Ayuntamiento de Barcelona para trabajar en una regulación justa para todos" y que tenga en cuenta a los miles de conductores y pasajeros de los VTC en Catalunya.
La compañía señala que desde que volvió a funcionar en Barcelona hace un año ha atendido a más de medio millón de clientes, dando trabajo a miles de conductores.
Cabify se ha sumado al adiós y ha enviado otro comunicado en el que asegura que "será a través de la aplicación que Cabify en la que se informará mañana a sus usuarios de su expulsión de Catalunya, tras la entrada en vigor del decreto ley que la Generalitat ha aprobado en el consejo.
Tras revisar el texto, que hoy es ya oficial, la compañía concluye que esta regulación tiene como único objetivo, y por tanto también como consecuencia final, la expulsión directa de la aplicación de Cabify y de sus empresas colaboradoras de Catalunya y Barcelona", destaca la firma.
"Así mismo, la plataforma agradece tanto a usuarios como a conductores y empresas colaboradoras su apuesta por la movilidad del futuro y por la solución que Cabify ha ofrecido durante 2 años en Catalunya y que inició su aventura en España hace ya 7 años", agrega.
"Cabify, empresa española con 1 millón de usuarios registrados en Barcelona, no puede sino lamentar que el Conseller de Territorio y Sostenibilidad de la Generalitat, Damià Calvet haya cedido a la presión y exigencias del sector del taxi, perjudicando gravemente el interés ciudadano", concluye.
La concejal de Movilidad de Barcelona, Mercedes Vidal, ha asegurado no entender que Uber y Cabify dejen de prestar servicio en Barcelona, dado que, según ha dicho, pueden seguir haciendo su trabajo si siguen las condiciones que marcan sus licencias. "El problema ha venido porque los vehículos de alquiler con conductor (VTC) han utilizado funciones de los taxis", ha declarado y ha añadido que de momento no tiene prevista ninguna reunión con Uber ni Cabify.
Vidal también ha avanzado que el próximo pleno del Área Metropolitana de Barcelona (AMB) del 26 de febrero establecerá el tiempo mínimo de antelación que se obligará para contratar los servicios de las VTC en la zona de Barcelona. Preguntada por la posibilidad de que la ausencia de Uber y Cabify afecte a la movilidad de los asistentes al Mobile World Congress (MWC), ha respondido que la tradicional "alta demanda" de VTC continuará durante el congreso.
"Habrá vehículos para dar servicio a este evento y a similares", y ha insistido en que los VTC pueden seguir haciendo su trabajo en la capital catalana si siguen las condiciones que marcan sus licencias. Según ella, los "problemas vienen de una competencia desleal de las VTC por determinadas plataformas especulativas, que realizan las funciones de los taxis".