Bruselas abrió en junio del año asado tres investigaciones en profundidad contra Irlanda, Holanda y Luxemburgo ante las sospechas de que estos países conceden ventajas fiscales indebidas a las multinacionales Apple, Starbucks y Fiat Finance and Trade.
Esta investigación comenzó después de la publicación de una serie de artículos de prensa que sostenían que determinadas empresas se habían beneficiado de importantes reducciones de impuestos gracias a decisiones anticipadas en materia fiscal (tax rullings) adoptadas por las autoridades fiscales nacionales.
Estas prácticas pueden incluir ayudas públicas ilegales si se confieren ventajas selectivas a una empresa o grupo de empresas determinado.
La comisaria de Competencia, Margrete Vestager, anunció en mayo que Bruselas no había podido recabar la información necesaria en la investigación para cumplir con el plazo comprometido de cerrar la pasada primavera los cinco primeros expedientes (los de Luxemburgo con Amazon y Fiat, el de Irlanda con Apple, el de Holanda con Starbucks y otro en Bélgica).
No obstante, confirmó que aparte de estos cinco expedientes, el Ejecutivo comunitario tiene entre manos "65 casos, que afectan a quince países".