De esta forma, Renfe extenderá este servicio al AVE con mayor demanda de viajeros, el que presta en competencia con el 'puente aéreo' y en el corredor con mayor demanda de pasajeros del país.
La operadora ofrece conexión 'wifi' en el AVE a Sevilla, el corredor en el que comenzó a prestar este servicio en diciembre de 2016. Un año después, a comienzos de 2017, lo amplió al AVE a Valencia, y en enero de 2018 lo puso en marcha en el AVE a Málaga.
Renfe ofrece 'wifi' a bordo a través de la plataforma 'PlayRenfe', que contempla dos tipos de conexiones, una básica y otra 'premium'. Esta última permite acceder a una plataforma con distintos contenidos de información y entretenimiento (libros, películas o libros, entre otros), e incluso a retransmisiones televisivas en directo, como pueden ser partidos de fútbol.
El coste de la conexión 'wifi' a bordo del AVE para el viajero es de entre 2 y 4 euros por viaje, si bien la conexión es gratuita para la opción básica si el viajero se inscribe en el programa de fidelización '+Renfe' de la compañía y para pasajeros de la Clase Preferente.
Renfe asegura que su servicio 'wifi' es el más amplio de los que ofrecen las distintas operadoras ferroviarias en todo el mundo. Con su puesta en marcha busca atender a una demanda de los viajeros del AVE, un servicio que transporta unos 22 millones de pasajeros al año.
La operadora está implantando el servicio de conexión a Internet en sus trenes en virtud del contrato que adjudicó por concurso público a Telefónica en octubre de 2015 por 148,63 millones de euros.
Durante su comparecencia en el Congreso, el presidente de Renfe avanzó que la plantilla de la operadora aumentará en 400 efectivos durante el ejercicio 2019, hasta situarse en unos 15.771 trabajadores.
Este aumento proviene, por un lado, de los 200 profesionales que, según indicó, se sumarán al proyecto de explotación del AVE a La Meca, "de los que el 35% son mujeres", según detalló Táboas.
El resto de los nuevos trabajadores son fruto del plan de renovación de la plantilla que la operadora aborda desde hace unos años mediante un plan de bajas incentivadas a los trabajadores de mayor antigüedad vinculado a ofertas de empleo público.
Con este programa, acordado con los sindicatos, la operadora busca reducir la edad media de su plantilla, actualmente de unos 54 años de edad, e incorporar nuevos perfiles profesionales en línea con la transformación digital que pretende acometer la empresa.