La cifra de Scarlett Johansson parece alta, pero se desinfla frente a la que logra su compañero, el forzudo, Dwayne Johnson, que gana 90 millones más. Casi el triple que ella.
El tema es sangrante y antiguo. Afecta a las actrices de cine y de las series más famosas. Jennifer Lawrence, Patricia Arquette, Emma Watson, Diane Keaton, Charlize Theron y Salma Hayek ya han alzado su voz para denunciar lo que consideran otra discriminación.
Mira el vídeo: Jennifer Lawrence denuncia la brecha salarial en Hollywood
Sin embargo, el tema llevará algo más que palabras para obligar a los productores abrir sus carteras para acabar con la disparidad salarial.
El pasado mes se hizo público el caso de Mark Wahlberg, que cobró 1,2 millones de euros más que su compañera Michelle Williams por repetir las escenas de 'Todo el dinero del mundo', tras la sustitución de Kevin Spacey en la película.
Williams a diferencia de su compañero cobró 800 euros, algo que sacó los colores al propio Wahlberg y a la productora.
La brecha salarial salta a la vista: Daniel Craig, como el próximo Agente 007 y Dwayne Johnson, por 'Red Notice' ganaron por su trabajo alrededor de 25 millones de euros, según datos de Variety , mientras que Anne Hathaway y Jennifer Lawrence percibieron un salario de 15 millones por sus papeles protagónicos en Barbie, y Red Sparrow, respectivamente.
La actriz Gal Gadot lo ha sufrido en carne propia y ha ganado el pulso a la Warner. Su mujer maravilla recibió una compensación nada maravillosa: Le pagaron 260.000 euros por 'Wonder Woman', un sueldo es muy inferior al que recibió Henry Cavill, el último Supermanque ganó casi 14 millones de euros interpretando al superhéroe.
En las series, las actrices tampoco salen mejor paradas. La fría Robin Wright de 'House of Cards' ganaba 70.000 euros menos por capítulo en relación con el suelo de Kevin Spacey.
Varias temporadas después, al enterarse de esta diferencia Wright exigió que su sueldo se igualara al de su compañero y coprotagonista de la conocida serie.
Jennifer Lawrence, fue una de las primeras actrices en usar un micro para denunciar la discriminación salarial, después de que el hackeo a Sony revelara las diferencia de sueldo que recibió por su participación en 'La gran estafa americana' y el de sus compañeros de reparto.
El movimiento #MeToo tiene un nuevo caballo de batalla en la larga e infinita carrera por la igualdad.