Tras las polémicas palabras de Jaume Collboni, teniente alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, en las que apuntaba a que “un camarero igual se tendrá que reconvertir en instalador de placas solares”, la hostelería de Barcelona se ha indignado. ‘Cuatro al día’ ha hablado con Pau Segurana, hostelero de la zona, que no ha podido ocultar su enfado:
“Las declaraciones nos han parecido muy desafortunadas, ahora necesitamos ánimo, apoyo y para nada son unas declaraciones que sienten bien a tantos miles de profesionales de este sector en esta ciudad, en un año que todo es insostenible. Damos por muerto al sector en Barcelona y sus palabras invitan totalmente al desánimo. Es como si la hostelería en Barcelona ya fuera una auténtica muerte y destrucción”.
Segurana explicaba que la situación es insostenible, por lo que estas declaraciones han sido un jarro de agua fría para el sector: “Están cerrando bares y restaurantes a un ritmo que da miedo y estas palabras a lo único que invitan es a cerrar y dejar de luchar… En nuestro caso tenemos más de 20 años de historia y llevamos un año luchando día a día, intentando ayudarnos entre todos para tirar para adelante y justo llegan estas palabras”.
Jaume Collboni entraba por teléfono en ‘Cuatro al día’ para justificar sus polémicas palabras: “Estaba hablando de la reconversión del modelo turístico”, comenzaba explicando, para añadir: “Esas declaraciones son parte de una entrevista de ‘El país’ en referencia a un dato sobre el paro, concretamente el que afecta a los trabajadores y trabajadoras del sector de la hostelería que se han quedado sin trabajo o se van a quedar”.
Collboni apuntaba a que jamás ha querido dar un mensaje de desaliento a un sector tan importante en la ciudad de Barcelona como es el de la hostelería, sino abrir camino a aquellos que buscan un futuro: “Quiero dejar claro que estamos peleando para que el sector se recupere lo más rápido posible, pero es un hecho que los sindicatos nos piden que las personas que van a tener dificultad para encontrar empleo lo busquen en otros sectores con más posibilidades”.
Finalmente, el teniente alcalde de Barcelona ha compartido los esfuerzos que están haciendo desde el consistorio para ayudar a la hostelería: “El Ayuntamiento de Barcelona está haciendo un gran esfuerzo para ayudar al sector de la restauración, hemos ampliado más de 3.000 terrazas y más de 5.000 mesas en un tiempo récord y hemos reducido la tasa que se paga por las terrazas en un 75%”.