He Jiankui levantó una gran polvareda en la comunidad científica internacional al asegurar el pasado 26 de noviembre haber creado los dos primeros bebés genéticamente modificados del mundo.
El médico, que había recibido donaciones de instituciones universitarias y empresas, explicó que había editado los embriones de las hermanas para desactivar de manera efectiva un gen relacionado con el VIH.
La universidad de Shenzhen en la que el llamado Frankestein chino colaboraba habitualmente y de la que había recibido fondos, negó conocer dónde se encontraba.
“En estos momentos no hay información precisa. No podemos responder ninguna pregunta sobre este asunto por el momento, pero si tenemos alguna información la brindaremos por los canales oficiales”.
He Jiankui reveló que usó la técnica de edición genética CRISPR/Cas9 en dos hermanas gemelas justificando que no buscaba eliminar enfermedades genéticas, sino "dar a las niñas la posibilidad natural" para resistir a una posible infección del VIH.