El 2015 TB145, conocido como 'asteroide calavera', 'Gran Calabaza' o 'cometa muerto' llevaba una velocidad de 125.500 kilómetros por hora la primera vez que se aproximó a la Tierra. El asteroide se descubrió el 10 de octubre de 2015 desde Hawái con el telescopio Pan-STARRS, pero el hecho de que su máxima aproximación a nuestro planeta ocurriera en la Víspera de Todos los Santos ayudó a que también fuese conocido con el nombre de 'asteroide de Halloween'.
El asteroide de Halloween podría ser en realidad un cometa extinto que ha perdido sus compuestos volátiles tras numerosos pasos alrededor del Sol. Gracias a las observaciones en el infrarrojo medio tomadas desde el VLT los autores pudieron detectar la emisión térmica del objeto. Con esta información y un modelo termofísico se pudieron conocer diversas propiedades de 2015 TB145, según SINC.
En algunas de las imágenes registradas por la NASA se llegó a observar que el asteroide en rotación se parecía a veces a una calavera humana debido a las condiciones de iluminación durante algunos momentos de su rotación.
“De las observaciones desde España obtuvimos que el período de rotación más probable para este objeto es de 2,94 horas, es decir, que su día dura aproximadamente ese tiempo; aunque no podemos descartar otra posibilidad: 4,78 horas, otra solución compatible con nuestros datos ópticos”, explica Pablo Santos-Sanz del Instituto de Astrofísica de Andalucía.
Las dimensiones del asteroide se encuentran entre 652 y 700 metros, según el experto. Además, Santos-Sanz lo caracterizó entonces como un asteroide "oscuro", cuyo índice de reflectancia es "apenas superior a la del carbón". El astro está clasificado como potencialmente peligroso, pero los astrónomos que han rastreado su trayectoria dicen que no hay posibilidad de que colisione con nuestro planeta, según RT.