La medicina en cuestión se llama BAN2401 y su cometido es eliminar una proteína conocida como amiloide y que es la principal causa del alzhéimer. No es la primera vez que se crea un fármaco con el objetivo de eliminar esta proteína, pero todos los demás ensayos han fracasado. Ahora se ha descubierto que los fallos anteriores se deben a que la medicina ha sido utilizada demasiado tarde y en pocas cantidades.
Biogen, una empresa estadounidense, y Essai, otra japonesa, están desarrollando juntas el fármaco. Ambas compañías han comprobado que los pacientes que han tomado su medicina han experimentado, dieciocho meses después, un descenso drástico en sus niveles de amiloide en el cerebro, desapareciendo poco a poco el alzhéimer.
"Ha habido muchas decepciones y, lamentablemente, soy un experto en esas decepciones. Pero soy bastante alcista y creo que estamos logrando un progreso significativo ", expone Stephen Salloway, director del Programa de memoria y envejecimiento en el Hospital Butler en Rhode Island y profesor de neurología en la Escuela de Medicina Alpert de la Universidad Brown.
Los científicos también están luchando contra tau, otra proteína que propicia que la enfermedad se manifieste. Han descubierto que una tomografía por emisión de positrones o PET experimental, hace posible la visualización de esta proteína.
“Hay que empezar a actuar temprano y ser muy agresivos. Tenemos años de trabajo por delante”, afirma Reisa Sperling, directora del Centro de Investigación y Tratamiento de la Enfermedad del Alzhéimer en Brigham and Women's Hospital, en Boston, en declaraciones recogidas por USA Today.
A pesar de este descubrimiento, aún queda mucho trabajo por delante ya que los investigadores aún deben calcular la cantidad exacta que hay que administrar, en qué etapa de la enfermedad debe utilizarse este medicamento y cuándo este debe iniciarse
Así, creen que una combinación de fármacos antiamiloide y antitau puede ser la respuesta al alzhéimer.