Sánchez no cede ante nada y persigue acabar la legislatura y aprobar los presupuestos

cuatro.com 28/12/2018 15:22

El Gobierno ha hecho más por la regeneración, la economía y la vertebración social en siete meses que Rajoy en siete años. El balance del presidente ha sido aún más triunfalista que los que protagonizaba Rajoy. La oposición hace un balance catastrófico de un gobierno que está en manos de los independentistas, y esperan unas elecciones a un presidente que creen que tiene miedo a las urnas y que es un títere de los independentistas. Podemos cree que el Gobierno lo que tiene que hacer es empujar más.

Sánchez lo quiere todo: agotar la legislatura y los PGE

Sánchez no cede, se mantiene firme, considera que su trabajo en Moncloa es muy superior al de Rajoy en siete años y no ve muchas tachas en su política hasta la fecha. En su balance de fin de año, el presidente ha abordado todos los temas con ese optimismo antropológico típico de Zapatero. Todo va bien. Vayamos paso por paso. En relación a las críticas vertidas por la oposición respecto a su relación al independentismo, Sánchez ha calificado como un mero monólogo las 12 propuestas de Torra (incluido el derecho de autodeterminación con mediación internacional).

Los puntos de Torra son un monólogo

Había muchas preguntas que hacerle al presidente más viajero de nuestra democracia. Sánchez ha dado valor únicamente al comunicado conjunto que pactó con Torra con motivo de su entrevista en el Palacio de Pedralbes el pasado 20 de diciembre, víspera del Consejo de Ministros celebrado en Barcelona. Esa declaración, ha subrayado el presidente, apuesta por alcanzar, dentro de la "ley" y el "diálogo", "grandes acuerdos" en la sociedad catalana que permitan superar el conflicto existente. "Lo demás son monólogos", ha señalado el presidente en alusión al documento con las 21 propuestas de Torra, que éste desveló días después de su entrevista con Sánchez.

En ese comunicado, el Ejecutivo español y el Govern catalán reconocen que existe "un conflicto sobre el futuro de Cataluña" y apuestan por vehicular, a través de un diálogo efectivo, una "propuesta política" que concite un amplio apoyo dentro de la sociedad catalana y que se sitúe "en el marco de la seguridad jurídica". El problema estriba en que, si para la Generalitat aquí cabría un referéndum pactado de autodeterminación, para el Ejecutivo español no hay más solución posible que reformar el Estatut para ahondar en el autogobierno catalán. Sánchez ha evitado valorar como un gesto de deslealtad el que Torra desvelara ese documento con sus 21 propuestas, pero sí le ha pedido al Govern catalán que "pase de la voluntad de dialogar al diálogo real", que ha de darse "siempre", ha avisado, "respetando la legalidad y la Constitución". "Dentro de la Constitución y del Estatuto de Autonomía podremos hablar de cómo encontrar una solución" al problema que se vive en Cataluña y que, reconoce el presidente, durante los últimos 10 años "ha afectado mucho a la política española".

Bajo el punto de vista de Sánchez, "no va a haber una solución política en Cataluña hasta que no haya un gran acuerdo que trascienda los bloques y se encuentre un punto de intersección entre el nacionalismo catalán y el no nacionalismo". Y a la búsqueda de ese acuerdo "va a estar el Gobierno de España, apuntalando la convivencia, reivindicando el diálogo y alejándose de la confrontación" y de esa "visión estrecha" que, en su opinión, algunas fuerzas políticas tienen de lo que representa España. A pesar de que se le ha preguntado expresamente por ello, Sánchez no ha aclarado si estaría dispuesto a volver a ser investido presidente del Gobierno con el apoyo de los partidos independentistas.

Tan sólo ha indicado que "no es lo mismo" llegar al Gobierno vía una moción de censura, como en su caso, que hacerlo en una investidura tras unas elecciones en las que se pacta un programa de gobierno con las fuerzas que le apoyan a uno. Y ha señalado que dentro de "la convivencia y la Constitución", su partido se podrá "encontrar con distintas fuerzas políticas". Lo que sí ha hecho por el momento es solicitar el apoyo de ERC y del PDeCat para que salgan adelante los Presupuestos Generales del Estado para 2019 que su Gobierno presentará en enero porque incluyen inversiones para Cataluña. Tampoco ha querido hacer valoración alguna sobre el inminente inicio del juicio del 'procés' porque la justicia ha de ir por su "carril" y la política por el suyo.

Un balance triunfal

Sánchez ha repasado sus siete meses triunfales. Para argumentarlo ha repasado las distintas medidas económicas acometidas por el Gobierno en estos meses, como la creación de la Autoridad Macroprudencial, el plan de empleo juvenil que movilizará 2.000 millones en tres años, o el plan director que ha permitido convertir más de 50.000 puestos de trabajo temporales en indefinidos, junto a medidas en Industria, como el Plan Reindus, dotado con 400 millones, o líneas de inversión por 80 millones.

Ha recordado también el incremento del SMI en un 22,3%, el mayor en cuatro décadas, hasta 900 euros a partir de 2019, lo que beneficiará a 2,5 millones de trabajadores, así como mejoras en materia de infraestructura, con la resolución de los contratos de las autopistas de peaje, las bonificaciones al transporte para residentes en las islas, Ceuta y Melilla, o el impulso al contrato de la Administración General del Estado con Renfe de casi 10.000 millones.

El líder del Ejecutivo se ha referido también a la "rapidez" para dar una respuesta al pago del impuesto de hipotecas, y las medidas en Función Pública, con la oferta de empleo público de 30.000 nuevas plazas, o el alza salarial de al menos un 2,25% en 2019, que podría sumarse otro 0,25% ligado al crecimiento y otro 0,25% por fondos adicionales.

Precisamente este mismo viernes el Consejo de Ministros ha aprobado la revalorización de las pensiones con arreglo al IPC tanto para 2018 como para 2019, con un alza del 1,7% este año (1,6% más una paga adicional de un 0,1% para equiparar a la inflación), y un alza del 1,6% para el próximo año, con un repunte del 3% para las pensiones minimas. Se da la paradoja de que algunas de estas medidas ya fueron aprobadas por Rajoy, ese que en siete años hizo menos que Sánchez en siete meses. ¿Y la exhumación de Franco que copó portadas?. "Si hemos esperado 40 años podemos esperar unos meses más". No, Sánchez no se pone nervioso.