Si bien es cierto que la cifra de empleo ha subido en nuestro país, el dato registrado este último mes de julio refleja una realidad preocupante. Es el peor dato desde el año 2008: el desempleo se sitúa por encima de los 3 millones de parados; y no sólo es poco el trabajo que se ha fomentado durante este verano sino que, además, es de mala calidad.