Hay una realidad, que no debemos perder de vista: aunque pueda parecer que los sectores agrícola y ganadero tienen una limitada posibilidad de creación de nuevos puestos de trabajo, la agricultura es absolutamente estratégica y vital para el medio rural y para el país, tanto en la parte comercial como en la tradicional.
Hoy viajamos hasta Gozón, en Asturias, y allí nos encontramos con Ramón Artime, ganadero con muchos años de experiencia, que comparte con nosotros su visión del estado del mundo rural actual, respondiendo a la pregunta que le planteamos:
P- ¿Tiene algo que decir el sector lácteo sobre la España vacía?
R- Ramón – En la juventud está el futuro. Yo creo que lo que se debe hacer son políticas para apoyar a los que hoy están produciendo en el campo español.
En los últimos años, el campo lo que ha hecho es poner en los lineales productos de calidad y a un precio que todo el mundo podía ir a comprar y alimentarse.
Los mensajes hay que hacerlos reales y hay que volverlos a la realidad y la realidad nos demuestra que la gente no vuelve al campo, así que hay que cuidar mucho a los que están porque los hijos de esos jóvenes, si sus padres viven bien, si sus padres tienen calidad de vida, tienen rentabilidad, seguirán allí. Esos jóvenes serán los jóvenes del futuro.
Es necesario poder concentrar todos los esfuerzos para evitar que el sector primario siga perdiendo activos, ya que necesita de manera urgente un relevo generacional, y que todo aquel que desee trabajar en la ganadería o la agricultura pueda hacerlo de manera rentable y con calidad de vida.
La supervivencia de estos sectores son una pieza fundamental no solo para el mantenimiento de la población del medio rural, de los parajes y de los recursos naturales, sobre todo son fundamentales para garantizar la supervivencia de la industria agroalimentaria.
Seguimos atendiendo a las llamadas del teléfono lácteo, que no para de sonar con preguntas interesantes. ¡Súmate a la conversación!