El Mundial de fútbol de Catar continúa repleto de polémica más allá de lo estrictamente deportivo. Las severas restricciones que imperan en el país tienen lugar también en las playas.
Las zonas de baño de la costa de Doha se dividen por familias, sexos o para occidentales sin restricciones… ¡pero pagando 30 euros!
Las públicas son sin duda las que tienen más restricciones y están segregadas por sexos. Incluso, como es habitual en el país, están prohibidas para personas homosexuales y las mujeres tienen que ir con el hiyab.
En la capital del lujo no solo se pagaría por darse un baño en la playa… el transporte en Doha también está marcado por el dinero y el lujo.