La inflación está calando también en la agricultura y la ganadería. Pero no solo eso. La sequía se ha llevado por delante los pastos. Unido a la subida de los precios de los piensos o la paja y a lo poco que se paga por la leche, los lecheros atraviesan una situación crítica.
‘Cuatro al día’ se ha desplazado hasta una finca de Colmenar Viejo, en la sierra madrileña, para conversar con Carlos, que cuenta con un ganado al que alimentar formado por 60 vacas y otras tantas ovejas, además de caballos.
La subida de los costes de producción y la sequía que se está atravesando, complican su continuidad en el sector: “Los sobrecostes ahora mismo son brutales. Es inasumible. Estamos pagando las facturas vacas y no sé cuánto lo aguantaremos”, comenzaba.
“A vacas productivas se las está llevando al matadero porque no podemos mantenerlas”, explicaba ante la imposibilidad de poder alimentarlas. El coste se ha encarecido hasta un 50 por ciento: “Les damos de comer con mucha penuria. O nos empiezan a ayudar ya de manera directa o vamos a cerrar”, concluía.