Esta semana el futuro ya está aquí: implantes de chips en humanos. Una tecnología que está revolucionando la medicina, la ciencia y la economía. Para muchos un avance, para otros sectores de la conspiración un elemento de grupos de poder para tener controlados nuestros movimientos de por vida. Al punto que determinados movimientos religiosos comparan la cicatriz que deja la implantación, con la marca de la Bestia.