El presentador de ‘Cuarto Milenio’ acude al programa con una pieza de mucho valor cultural. Hablamos de una cabeza que se encontró cerca de las murallas de Jericó, la ciudad bíblica, haca 11.000 años: “Me acompaña el primer zombi de la historia”, dice Iker Jiménez.
Explica el conductor de la Nave del misterio que, antes de cualquier sagrada escritura y religión conocida, en las tierras de Jericó, las personas sacaban a los muertos de sus tumbas y hacían un rito de lo más sorprendente.
Reflejaban una especie de rostro, muy similar a un maniquí, en el que colocaban conchas marinas como ojos. Después, colocaban estas cabezas en unas primitivas murallas para que vigilaran la presencia del enemigo. Era una forma de dar miedo a los rivales y, en Jericó, fueron los primeros en utilizar el instrumento del miedo en la antigüedad.
Gracias al artista Juan Villa, hemos podido tener en nuestro plató las distintas representaciones de las cabezas que se utilizaban en distintas culturas y partes del mundo. Unos rostros que eran muy distintos en cada una de las zonas geográficas.