José Pedro Negri, inspector jefe de la Policía Nacional acudió al domicilio junto a otros tres agentes y redactó el histórico informe oficial de la muerte de Estefanía. Regresa a la casa donde ocurrió todo junto a Iker Jiménez y reconoce no haber olvidado lo que vivió allí. Especial mención hace al hablar de un estruendo que se escuchó desde la terraza, la caída de un crucifijo y la aparición de un poster arañado, que dejó la puerta totalmente desgarrada. Reconoce que tuvo una muy mala sensación al entrar en la casa y en el cuarto de baño.