Iker Jiménez ha dedicado unas palabras a los españoles que lograron construir la Edad de oro del software en nuestro país. Asegura que aquellos niños, de entre 14 y 16 años en su mayoría, se convirtieron en verdaderos genios del ordenador. En los años 80, en el norte de Madrid y tras ver que los microprocesadores llegaban a España, los jóvenes hermanos Tejedor comenzaron a crear primitivos juegos dando lugar a la primera industria española de este es tipo. “Ellos tenían alma de emprendedores”, ha afirmado.