Un empresario importante fue retenido y nadie sabe dónde está. El padre Pilón se unió a la investigación con un instrumental rudimentario: su famoso péndulo. Sacó un mapa y el péndulo señaló una zona caliente. Van acotando la zona papel a papel y el péndulo señala una zona concreta del País Vasco. La guardia civil se trasladó a ese punto, donde el padre Pilón estaba seguro de que allí se encontraba el empresario, vivo o muerto. Sin embargo, no le encontraron. Más tarde descubrieron que esa fue la zona donde estuvo retenido mucho tiempo.