Mar Gómez ha acudido a 'Cuarto Milenio' para resolver un gran interrogante: ¿Cómo es el clima fuera de nuestro planeta? Asegura que el clima de Saturno, debido a la lluvia de diamantes y piedras preciosas, es algo peculiar. Al igual que Júpiter, Urano y Neptuno, es un 'gigante gaseoso' es decir, un planeta compuesto principalmente de fluidos y es en ellos donde ocurren estas misteriosas precipitaciones.
Venus, por su parte, se podría definir como "el infierno". Sus condiciones climáticas son muy extremas y las presiones atmosféricas son noventa veces superiores a las de la Tierra. Por ello, si alguien lo visitara, moriría aplastado o disuelto. Además, se producen constantemente lluvias de ácido sulfúrico.
Júpiter es el planeta más grande del Sistema Solar y también es un gigante gaseoso. Sus nubes de amoniaco y su color rojizo podría deberse a la combinación de esta sustancia y la radiación ultravioleta. Además, el cielo de Marte es de este mismo color menos cuando amanece o atardece ya que, en ese momento, el firmamento se tiñe de azul.
La débil gravedad de la Luna hace que carezca de fenómenos meteorológicos. Allí no existen los vientos y tampoco la erosión, únicamente están presentes los cambios de temperatura. Esto explica que, a pesar de los años, la huella de Neil Armstrong todavía permanezca intacta.