Iker Jiménez ha dedicado su sección ‘El cierre’ desde su nave del misterio a aquellos casos que nos han marcado y que se han quedado guardados en algún rincón de la memoria. El presentador ha compartido con sus seguidores una de esas anécdotas que no olvida pese al paso del tiempo y pese a que a veces ni siquiera recuerda lo que ha comido el día anterior.
Iker se pregunta cómo puede recordar avistamientos de OVNIS de personas que ni siquiera conoce ocurridos en los años setenta y no es capaz de recordar el nombre de algunas personas a las que ve a diario: “Es eso que tiene que ver con el misterio lo que se guarda para siempre en un rincón de la memoria”.
Iker ha explicado que siempre supo que iba a dedicarse a esto del misterio porque sentía absoluta pasión por ello y porque era lo que movía su vida y ocupaba su memoria. El presentador siempre tuvo claro que su absoluto amor por el misterio iba a marcar su vida.