Juan Soto Ivars revela todo sobre el Necronomicón: ''Mucha gente cree que existe, pero no ha existido nunca''
Iker Jiménez y Juan Soto Ivars reflexionan sobre el Necronomicón, el libro que forma parte de la biblioteca de los libros malditos
Soto Ivars explica detalladamente todo lo que hay detrás del libro de H. P. Lovecraft
La nigromancia en la antigüedad: ‘’Ya se hablaba de magia negra y magia blanca’’
Juan Soto Ivars se sienta una vez más junto a Iker Jiménez en ‘Cuarto Milenio’ para hablar sobre un libro que forma parte de la biblioteca de los libros malditos, el Necronomicón.
Para el presentador este libro se trata de ‘’el más célebre ejemplar’’ de los últimos tiempos e indica que es el libro sobre el que ‘’más especulaciones y fantasías se han hecho’’
Soto Ivars habla sobre el libro de H. P. Lovecraft: ‘’Es uno de los grandes mitos del ocultismo, de las ciencias oscuras, la necromancia porque no solo hay un Necronomicón, había otras fuentes anteriores e influencias’’.
El escritor explica que la necromancia se remonta al tiempo de los egipcios e indica que es el intento de establecer una conexión entre el mundo de los libros y el de los muertos: ‘’Se dice que hay tratados anteriores a la época medieval de los que no se conserva casi nunca ningún ejemplar, pero sí hay referencias. Aparecen libros de necromancia en los índices de libros prohibidos de la inquisición’’.
Además, revela algo que muy poca gente sabe: ‘’Lovecraft inventó ese Necronomicón, nació el mito y empieza a pasar algo muy divertido que es que como escribe muy académicamente sobre este libro, cita fuentes, traducciones, para contar una historia ficticia que no existe, pero después de Lovecraft empiezan a aparecer autores que deciden alimentar esa fantasía, pero en un tono como si fuera verdadera. Ahí nace esta confusión, mucha gente cree que el Necronomicón existe, no ha existido nunca’’.
El escritor hace una reflexión: ‘’Lo que nos está diciendo la invención de Lovecraft es que viajar al mundo de los muerto solo se puede hacer a través del mito, de la invención y es lo que hace la historia antigua, no estoy diciendo que los historiadores se inventen nada, pero sí muchas veces sus fuentes’’.