Iker Jiménez ha hecho un viaje muy especial. El conductor de ‘La nave del misterio’ se ha desplazado hasta Selçuk (Turquía) para visitar la tumba de San Juan y reflexionar sobre sus escrituras sobre el Apocalipsis. Él escribió sobre las bestias que emergen, sobre el Anticristo, el 666… ¿Una profecía que aún está por llegar?
En la ruina de Selçuk (antigua Éfeso), desde el siglo VI, hay una veneración a la tumba de San Juan Evangelista, “el personaje más enigmático de las Sagradas Escrituras”. Allí se encuentra “una losa que cubre la memoria y el cuerpo del cronista del Apocalipsis”, apunta Iker. Cerca se encuentra también un pozo bautismal y el lugar donde, dicen, la Virgen María ascendió a los cielos.
“Nadie sabe realmente si el cuerpo está aquí, pero cristianos y musulmanes visitan estas ruinas y muchos rezan en silencio. Algunos pelean y discuten fuera, sabedores que ese libro y su autor, esa revelación, ese Apocalipsis, está más vivo que nunca en las mentes de tantos. Es un texto sagrado, extraño, que quizás nos cuente más de lo que imaginamos y de lo que ahora estamos viviendo”, reflexiona Iker al respecto.
Junto a Iker Jiménez se encuentran Javier Sierra (escritor) y Antonio Piñero (catedrático emérito en filología griega y experto en cristianismo primitivo), que considera que el Apocalipsis es un libro “violento, pero también de consuelo, de ánimo, de que se acerca el final pero la divinidad está con nosotros”. Apunta que Isaac Newton estaba “obsesionado con San Juan y escribió su propia profecía”.
Por su parte, Sierra señala los terribles conflictos mundiales que se están viviendo en la actualidad y que da la sensación de que “nuestra sociedad tiene la necesidad de que esto que estamos viviendo ahora ya había sido predicho por los antiguos. Esto tiene un doble juego: tener entretenida a la población y que los creadores de estos hechos lo usen como propaganda. Hitler, por ejemplo, utilizó las profecías del Nostradamus para justificarse”.