Así es la tortura blanca: cómo acabar con la cordura de los detenidos a través de tácticas psicológicas
El coronel Pedro Baños analiza algunos tipos de tortura psicológica que aún hoy se emplean en cárceles del mundo
Privación del sueño, exceso de estímulos o cubículos extremadamente pequeños como forma de tortura
“El ingenio humano para dañar a sus congéneres no conoce límites”
En este último programa de ‘Cuarto milenio’ Pedro Baños se ha puesto una vez más al frente de la sección ‘El dossier del Coronel’. En esta ocasión, Baños llega hasta la nave del misterio para hablar de tortura psicológica.
La tortura psicológica ha sido empleada durante décadas por los expertos de la guerra para dañar psicológicamente a sus enemigos de por vida. Privándole de luz, de contacto humano, impidiendo su descanso o incluso atormentándoles con estímulos constantes.
Desde la CIA en Estados Unidos con sus cárceles secretas hasta las checas utilizadas en España durante la Guerra Civil, pasando por la tortura psicológica de “cinco pasos” empleada en Irlanda del Norte.
Algo sorprendente es la participación de médicos y psicólogos en este tipo de experimentos con humanos: “Expertos llegaron a hacer estudios sobre cuántos voltios podía aguantar el cuerpo humano antes de morir o cuánto tiempo tardaba el detenido en perder la cabeza tras estar en aislamiento extremo”.
Pedro Baños habla en profundidad sobre la conocida como “tortura blanca”, una técnica que consistía en privar a los detenidos por completo de contacto con otros seres humanos y a los que no se les dejaba dormir durante días: “Esta tortura se empleaba hasta hace no mucho en la prisión de Guantánamo, en Cuba”.