Las pruebas de la presencia nazi en la Costa Brava: el cuaderno de Günter Zeschke
Iker Jiménez aborda todo sobre el cuaderno nazi, un libro que acaba conectando con las expediciones ‘’más o menos clandestinas’’ de los nazis en España
El diario apareció en San Felíu de Guixols, fue un librero quien dio con él
Iker Jiménez aborda en ‘Cuarto Milenio’ todo sobre el ‘Cuaderno nazi’, un libro que acaba conectando con las expediciones ‘’más o menos clandestinas’’ de los nazis en España, sobre todo en la Costa Brava.
‘’Es un libro, es un hallazgo, es tantas cosas, es tanta tragedia. Es una aventura que ha pasado en nuestro país y que ustedes no se van a poder creer’’, comienza el presentador
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Según indica el presentador: ‘’Buscaban algo, materiales poderosos, esa chispa mineral que encendía las grandes bombas y tecnologías de ese tiempo terrible. Pero en la propia historia del autor del cuaderno, un misterio, un enigma, una muerte’’.
Todo comenzó cuando un librero de Badalona que adquirió el diario se dio cuenta de que el cuaderno con información sobre el frente de guerra tenía más importancia de lo que cabía imaginar.
El descubrimiento del libro le hizo toparse con varias incógnitas ¿Quién era el autor del diario? ¿Cómo apareció en Cataluña? Poco a poco, el librero junto con el periodista Ferrán Barber fueron dándole forma al histórico rompecabezas.
Ahora, el programa ha realizado una investigación sobre el cuaderno y, con la ayuda de ambos expertos, ahonda en los entresijos del diario nazi.
‘’En muy pocos días supimos que el autor de ese diario era un soldado alemán que se llamaba Günter Zeschke’’ explica el periodista. ‘’A partir de ahí descubrimos dónde estaba el hombre dónde había estado, había estado en el frente de Noruega (…) En febrero del 42 es cuando acaba el diario’’, indica Marçal Front, dueño de la librería.
‘’Nos fue relativamente sencillo averiguar que Günter se había convertido, después de la segunda guerra mundial, en un reputado geólogo (…) La segunda enorme sorpresa fue descubrir que su hija Margarita Zeschke estaba viva, no solamente descubrimos que estaba viva si no que dimos con ella’’, explica Ferrán.
El entramado nazi en San Felíu de Guixols.
Situadas en la provincia de Gerona, las minas de Osor ya antes de la llegada del geólogo habían abastecido de fluorita a la industria de guerra nazi durante la contienda europea. La España ‘’supuestamente’’ neutral de Franco ayudaba al principal enemigo de los aliados.
‘’Es uno de los lugares en los que Günter Zeschke estuvo trabajando en cinco o seis minas en España siempre prospectando uranio o fluorita o minerales aledaños al tema radiactivo. Un dato relevantísimo para nuestra investigación fue el asunto de que fuera contratado por Lipperheide’’, explica el periodista.
Según indica Ferrán, el diario apareció en San Felíu de Guixols: ‘’No es un lugar cualquiera, probablemente había varias oficinas de agrupaciones locales del partido nazi y la de San Felíu era una de las más importantes (…) Fue una especie de nodo nazi y nosotros sospechamos que eso se extiende a toda la Costa Brava’’.
Margarita Zeschke habla con ‘Cuarto Milenio’
El programa ha contactado con la hija de Günter Zeschke para conocer a fondo la historia del reputado geólogo. Margarita explica que el cuaderno nazi siempre ha estado en su casa y que no sabían qué hacer con él.
Ha explicado que la solución que encontró al respecto fue entregarle el diario y los álbumes de fotos a un exmilitar que ‘’coleccionaba cosas de guerra’’.
Al parecer, la vida del geólogo se vio brutalmente alterada por un brote psicótico de esquizofrenia: ‘’Papá empezó a hacer cosas raras. Las últimas semanas las pasó en un hospital’’. Margarita ha explicado que se tuvieron que mudar porque según su madre, Günter ‘’podría atentar contra sus vidas’’.
Según explica Ferrán, el soldado se quitó la vida con una pastilla de cianuro al igual que hizo Hitler.