“Se habla de paridad, de cuotas, y yo a mí, a Iker el facha, eso no me convence porque he pensado por ejemplo en mi hija, yo creo que a ella no le gustaría que le diesen un trabajo por cumplir una cuota, por ser mujer, le gustaría que se lo dieran por sus méritos, al igual que a mí no me gustaría que me lo dieran por el simple hecho de ser hombre, de medir 1’80 o de haber nacido en Vitoria (…)
Estoy harto de ver casos de personas que no creen en lo que dicen pero se abrazan a ello porque creen que es popular en este momento o porque creen que al menos así no les van a dar ciertos palos, y esto en ámbitos de la política o los medios de comunicación en esencial, pero a mí eso no me convence (…)
Como les he dicho yo tengo una hija y quiero lo mejor para ella igual que para todas las mujeres pero, ¿es realmente importante para la lucha lo que se está haciendo? Hay personas que me dicen que solo traigo a hombres al programa y yo les digo, ¿pero hay algo que importe más que el contenido? Cuando elegimos a las personas que vienen aquí nos importa un pito su género”.