Un exradarista del Ejército del aire detalla el día que avistaron un OVNI: "Recuerdo cómo los pilotos gritaban"
OVNIS captados por el radar: invaden nuestro espacio aéreo y ponen en jaque a los pilotos.
Habla Luis Miguel Zamorano Cobos, suboficial del Ejército del aire y radarista entre 1968 y 1998.
El informe de lo que sucedió fue catalogado como confidencial y secreto.
Invaden nuestro espacio aéreo, ponen en jaque a nuestros pilotos y, en ocasiones, dejan rastro. Iker Jiménez reflexiona sobre la presencia de “algo anómalo que llama la atención a distintas fuerzas aéreas” inevitable de negar: “No sé si son naves extraterrestres, hacemos un paneo sobre las distintas posibilidades”.
Testimonios de pilotos, de la Guardia Civil, Policía, de personal de la marina y hoy damos un paso más allá y contamos con las palabras de los radaristas militares, el culmen de la técnica acoplada a la vigilancia aérea. “Es un reportaje excepcional por lo que se cuenta y cómo se cuenta. Por primera vez en España, alguien tan importante del Ejército (el Teniente Zamorano), que vigilaba la presencia de aeronaves sobre el espacio, cuenta lo que cuenta.
El testimonio de Luis Miguel Zamorano, radarista en el Ejército del aire
Muchos pilotos, tanto civiles como militares han sido testigos de avistamientos de OVNIS cuya credibilidad viene avalada por su calificación aeronáutica. Menos casos tenemos de controladores aéreos. Luis Miguel Zamorano Cobos, suboficial del Ejército del aire y radarista entre 1968 y 1998), habla para ‘Cuarto Milenio’.
La primera vez sucedió en mayo del 69: “No se veía un avión con alas, sino una luz brillante. Aquel objeto volador no identificado, jugaba con el avión. El capitán pidió hacer un despegue inmediato. Se acercaron los F86, hablaron con el avión, pero el objeto cambiaba de forma, subía y baja y era de color plata brillante. Recuerdo que gritaban por los altavoces cómo cambiaba de forma. Un avión no puede girar 90 grados. Empezaron a perseguir el OVNI, hasta que se quedaron sin combustible. El informe fue clasificado como confidencial y secreto”.
Zamorano se refiere a este informe con una serie de incongruencias, que fue desclasificado en los años 90. En él no se describen “los movimientos imposibles” del OVNI ni los detalles del objeto tal y como lo vieron los radaristas ni se menciona la persecución. Hubo más experiencias similares, hasta que, en el 96, vio uno con sus propios ojos.