El formato holandés de éxito internacional ya ha sido adquirido por televisiones de todo el mundo.
Es una de las grandes apuestas de ABC para la próxima temporada.
Cuatro y Cuarzo Producciones preparan la versión nacional del programa de investigación.
Cuatro ha adquirido los derechos de la que será una de sus grandes apuestas para la próxima temporada: Perdidos sin rastro (Spoorloos Verdwenwn), formato original holandés que ha cautivado a cadenas de televisión de todo el mundo, y que llega a España de la mano de Cuatro y Cuarzo Producciones. Se trata de un programa de investigación que busca a personas en paradero desconocido en un trepidante viaje a través de una red de investigadores y colaboradores repartidos por todos los continentes.
Perdidos sin rastro (Spoorloos Verdwenwn) continúa siendo un éxito en Holanda tras 17 años en antena en la cadena Ned 1, donde ha cosechado audiencias del 37% de share, cifra muy por encima de la media del canal (22%). Además, ha triunfado en sus distintas versiones en Australia, Suecia, Dinamarca y Bélgica. La estadounidense ABC ya está preparando una nueva adaptación, que será una de las apuestas de su nueva temporada, al igual que otras cadenas de Finlandia, Noruega, Israel y Estonia. Perdidos sin rastro es un fenómeno televisivo a nivel mundial que aterriza en nuestro país a través de Cuatro.
El equipo de Perdidos sin rastro acompaña y ejerce de guía en una investigación cargada de emoción: la de aquellos que buscan a un ser querido que un día desapareció sin dejar rastro, y que hoy se encuentra en paradero desconocido. El programa viaja a cualquier punto del mundo donde se haya visto al desaparecido, siguiendo las huellas que su paso haya podido dejar. Visita lugares en los que esa persona que lo abandonó todo sin mirar atrás ha podido encontrar su refugio. Y lo hace junto a aquellos que, a cada paso, sienten más cerca a ese ser querido que un día perdieron, y que, emocionados, relatan los entresijos de su relación y los motivos por los que todo se echó a perder. Y, como punto culminante tras la investigación, Perdidos sin rastro es testigo de la emoción del reencuentro final o del amargo trago que supone una búsqueda no resuelta.