El cierre de Iker Jiménez: el elixir de la juventud
Desde el principio de la historia de la raza humana, la idea de un elixir de la eterna juventud, o de la vida eterna, estaba ahí. ¿Quién no quiere vivir mucho más? ¿Usted quiere? ¿De qué forma? Ahí se abren los abanicos y la ciencia está generando cosas que nos parecen absolutamente increíbles. Y está haciendo que las vidas, que hace no tanto eran prácticamente la mitad, tengan mucha más oportunidad de enriquecimiento personal, no en el monetario sino en el espiritual.
No sé cuál es el elixir, aunque sí pienso que la comida es fundamental. No entiendo como la gente que tiene recursos no se cuida un poco. Hablemos del ciudadano tipo que está más o menos sano, qué tiene que hacer para vivir más. Hay un elixir vital que siempre ha estado ahí, les puede parecer una tontería: Hay muchas formas de vivir y de estar, y yo analizo a cada persona, es un defecto, porque siempre creo que se puede aprender de todo el mundo. Hay grados de sed de conocimiento. Es una droga a la que estoy acostumbrado, por la increíble oportunidad de que no sé cuánto va a durar mi vida. Cuando uno tiene la oportunidad de compartir con personas muy importantes y que cree que tienen conocimientos y posibilidades, se sorprende mucho porque se da cuenta de que hay dos tipos de personas: unas muy cansadas o que no tienen entusiasmo y luego hay otras que quieren absorber conocimiento porque se han acostumbrado al extraño placer cotidiano de aprender cosas.