FELIPE, ¿POR QUÉ?
Me he quedado helada, supongo que como cualquiera que haya leído la declaración de Felipe González en el suplemento Domingo de El País. ¿Por qué ha dicho algo así?. Nada menos que tuvo "una sola oportunidad en mi vida de dar una orden para liquidar a toda la cúpula de ETA. La decisión es sí o no. Dije no. Y añado esto: todavía no sé si hice lo correcto... " Este bombazo informativo ¿ha sido meditado? Todo parece indicar que sí, puesto que es él el que lo saca en la entrevista en un momento en el que nadie esperaba la revisión de un pasado que ha sido juzgado y por el que algunas personas fueron a la cárcel.
El planteamiento es brutal porque liquidar a alguien no está en ningún supuesto democrático, en el que por muy dura que sea la situación y aunque hablemos de criminales, lo único aceptable es detener y juzgar; entonces ¿será verdad que está pagando deudas pendientes con Barrionuevo, Vera y Galindo, a los que exculpa de cualquier responsabilidad en la "guerra sucia"?, ¿Querrá dejar cerrado ese capítulo de la historia con la pelota en su tejado como un compromiso con las familias de los únicos que sufrieron las consecuencias de un episodio tan oscuro?
Estoy impaciente porque llegue el momento de mi tertulia política para contrastar otras opiniones; escribo sobre una primera impresión. Acabo de llamar a Barrionuevo y no quiere hablar. Imagino que pensará que otros tienen que reescribir esa historia nunca bien conocida. Mientras tanto, el Partido Popular calienta motores y se relame ante unas jornadas que se presumen cuajadas de una revisión histórica que ahora sí interesa, de la que, quizá se saque tajada política. El portavoz Esteban González Pons, que lleva un par de meses queriendo dar los titulares más duros de los medios, ya ha dicho que Felipe González se ha puesto la X de los GAL. Y esto es sólo el principio.
Mi pregunta es ¿A quién beneficia esta afirmación de González? A él no, desde luego, tampoco a su partido; en todo caso a la historia de los que pagaron aquel episodio, quizá a sus hijos o a sus familias. Insisto, ¿por qué?, ¿para qué?