Nakhane, orgullo y belleza
Escuché a Nakhane Touré (Alice, Sudáfrica, 1988) cantar “Just Like Heaven”, de The Cure, y fue suficiente. Sólo voz y guitarra. Apenas 23 años. Entonces ya despuntaba como un referente LGTB en su país natal, Sudáfrica, un aparente paraíso para los homosexuales en un continente donde todavía se considera una aberración amar a personas del mismo sexo, donde se amenaza, criminaliza y encarcela, a quienes como Nakhane no se esconden y hacen bandera de su libertad.
Pero no siempre ha sido así. Nakhane pasó por años oscuros antes de asumir su condición. Cayó en el inhóspito territorio de la incomprensión. Era, como otros muchos, un joven atormentado, inseguro y lleno de preguntas en un entorno religioso y tradicional. Su pertenencia a la etnia Xhosa, transmisora de las esencias de la Sudáfrica más ancestral, llegó a ser una losa insoportable.
Sin embargo, en la música encontraría la manera de responderse a sí mismo. Al principio con miedo y después con absoluta claridad, como lo demuestra su evolución desde el álbum iniciático, Brave Confesion (2013)Brave Confesion hasta You Will Not Die (2018). En el primero, canciones como “In the Dark Room” o “Abraham” reflejan la tempestuosa búsqueda de la identidad sexual, la confusión y la fe cristiana.
Fue un buen inicio porque pronto comenzaron a llegar los premios (mejor álbum de música alternativa) y las críticas alentadoras. Pero Nakhane prefirió tomar distancia y cambiar. Vestirse de plata y resucitar a Prince en “Interloper”. Para esta nueva etapa se acompaña de sintetizadores y guitarras eléctricas, aunque su voz mantiene el desgarro del alma más torturada de la tierra.
Here My Dear (Motown,1978), de Marvin Gaye, cambió la vida de Nakhane. Un disco que es una confesión a pecho descubierto de los peores años de matrimonio con Anna Gordy, y cuyos beneficios, Gaye —ya completamente arruinado— fue condenado a entregar a su ex esposa.
El músico nacido en Alice es un río que no obedece al curso de lo esperado y sorprende también por sus inquietudes literarias. Su primera novela, Piggy Boy’s Blues,Piggy Boy’s Blues apareció publicada el año pasado en Blackbirdbooks, de Thabiso Mahlape, una de las editoras más arriesgadas e innovadoras de Sudáfrica.
Músico, escritor y actor. Nadie pensaría con sus antecedentes que el cine le iba a prometer una entrada fácil. Así que en su primera incursión Nakhane protagoniza una historia de amor gay dentro de la comunidad Xhosa, en La Herida La Herida(The Wound) de John Trengove. Aspiraban a un Oscar pero se cruzaron la indignación de los líderes tradicionales sudafricanos y las presiones para abortar la exhibición en las salas de cine de su país.
No hay intolerancia ni odio que pueda detenerle. Nakhane se siente poderoso en el arte, ese lugar soñado en el que nada horrible puede suceder, y donde compartir lo que uno ansía o imagina lo transforma en algo casi real.